Desde este domingo 1 de diciembre, el precio del ACPM (diésel) experimentará un nuevo aumento de $400 por galón, lo que lleva su valor promedio a $10.248, con una pequeña diferencia en Barranquilla, donde el precio será de $10.244. Este ajuste se enmarca dentro de un acuerdo alcanzado en septiembre entre el Gobierno Nacional y las asociaciones de transportadores, para realizar aumentos graduales en el precio del combustible.
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Este es el segundo incremento programado para el ACPM en lo que va de 2024. El primero tuvo lugar en septiembre, cuando se elevó $400, y ahora, a partir de diciembre, se aplicará otro ajuste similar. Cabe resaltar que este aumento solo afecta a los consumidores que adquieren el ACPM en estaciones de servicio, ya que los grandes consumidores (quienes compran más de 20.000 galones mensuales) ya están pagando el precio completo desde el mes de junio.
Ministerio de Minas y Energía explica el aumento
El Ministerio de Minas y Energía ha explicado que este aumento responde a la necesidad de cerrar la brecha fiscal del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC). Sin embargo, este ajuste generará diversas reacciones, especialmente entre los sectores de transporte y la industria, ya que el aumento en el precio del diésel afectará los costos operativos de los transportadores, y con ello, el precio final de productos y servicios.
Los expertos advierten que este aumento podría generar un efecto en cadena, especialmente en el transporte de mercancías y en la movilidad de combustibles, impactando en la economía de todo el país. El costo de los productos esenciales podría subir, afectando el poder adquisitivo de los colombianos. Además, el sector agrícola también se verá afectado, ya que muchos tractores y maquinaria agrícola funcionan con ACPM, lo que incrementará los costos de producción y podría reflejarse en precios más altos para los alimentos.
Con este nuevo ajuste en los precios de los combustibles, la economía colombiana enfrentará un desafío adicional en su lucha contra la inflación, lo que podría afectar la estabilidad financiera de los hogares y empresas del país.