Congresistas de oposición e independientes, incluidos varios precandidatos presidenciales, convocaron a la “Gran Marcha del Silencio” para este domingo 15 de junio. El objetivo es rechazar de manera pacífica la reciente oleada de violencia que afecta a Colombia y que ha dejado muertos y heridos. La cita principal será a las 9:00 a. m. en el Parque Nacional de Bogotá, pero también se esperan movilizaciones en otras ciudades del país.
Los convocantes invitaron a la ciudadanía a unirse en silencio, como símbolo de dolor, resistencia y esperanza frente al aumento de ataques armados. La iniciativa nació como respuesta directa al atentado contra Miguel Uribe Turbay y los múltiples actos terroristas ocurridos en las últimas 48 horas en el suroccidente del país. Según los organizadores, no se trata solo de una protesta, sino de un acto de unidad nacional por la democracia y la vida.
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Figuras políticas respaldan la movilización desde el Congreso
Senadores del Centro Democrático como Paloma Valencia, María Fernanda Cabal y Paola Holguín respaldaron la convocatoria y tomaron la palabra durante el anuncio oficial desde la Plaza Núñez del Capitolio Nacional. “Los violentos no van a escribir el destino de los colombianos”, sentenció Valencia. Cabal, por su parte, destacó que esta marcha encarna la libertad de expresión y movilización garantizadas por la Constitución.
Junto a ellas también se sumaron parlamentarios de los partidos Conservador, La U y Cambio Radical, así como la periodista y precandidata Vicky Dávila. El senador Efraín Cepeda, presidente del Congreso, subrayó que “Colombia ha superado a los criminales en el pasado, y esta vez no será diferente”. La ubicación del anuncio, justo frente a la Casa de Nariño, fue un gesto simbólico de presión hacia un Gobierno que mantiene una relación cada vez más tensa con el Legislativo.
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Un escenario político marcado por marchas paralelas
La “Gran Marcha del Silencio” se anunció el mismo día en que sindicatos afines al Gobierno, con respaldo abierto del presidente Petro, convocaron a movilizaciones para hoy 11 de junio en respaldo de sus reformas sociales. Así, Colombia se prepara para un fin de semana cargado de manifestaciones, algunas a favor del Ejecutivo y otras en rechazo a la inseguridad, la polarización y la gestión institucional.
La marcha del domingo tiene una fuerte carga política: varios de sus impulsores también buscan posicionarse como alternativas en las próximas elecciones presidenciales. Sin embargo, los organizadores insistieron en que el enfoque principal será la unidad ciudadana frente al dolor nacional, no los intereses partidistas. “Convertimos el dolor en esperanza, y esa esperanza camina este domingo por las calles del país”, expresó Paola Holguín durante su intervención.