Una tragedia ocurrida en Pasto, Nariño, ha puesto a la familia Zambrano en una crisis humanitaria y judicial. Sara Yuliana, una joven de 15 años, se debate entre la vida y la muerte en un pabellón de quemados, con el 80 % de su cuerpo comprometido por quemaduras de segundo y tercer grado. Según la versión de sus familiares, el grave incidente ocurrió hace más de cuatro meses en el lugar donde trabajaba: una fábrica de perfumes.
La familia pide a gritos justicia, pues aseguran que los responsables del presunto ataque, quienes serían compañeros de trabajo también menores de edad, permanecen en libertad sin enfrentar consecuencias.
Una lucha médica de más de 40 cirugías
La gravedad de las heridas de Sara Yuliana ha requerido una intervención médica constante e intensa. La menor ha sido sometida a un riguroso proceso de recuperación, acumulando a la fecha 43 cirugías.
Su padre, Wilson Zambrano, describió la devastadora situación: “Cada cirugía que le hacen le sacan piel de ella misma para poderle injertar,” un proceso que mantiene a la joven en un estado de extrema vulnerabilidad. El hecho de que la menor se debata “entre la vida y la muerte” es un recordatorio constante de la gravedad de las quemaduras.
Denuncia de impunidad en el caso
El incidente, que según los padres fue provocado, se habría dado cuando los presuntos responsables rociaron a Sara Yuliana con sustancias inflamables como alcohol y thinner (solvente). El padre asegura que, minutos después del ataque, su hija, herida, señaló a quienes le habían quemado.
Pese a la gravedad del caso y las pruebas que, según los padres, fueron aportadas a las autoridades, la familia asegura que los responsables siguen “caminando por las calles sin ningún tipo de consecuencia”. El caso Sara Yuliana Zambrano está en el centro de un llamado urgente para que el sistema judicial actúe con celeridad y evite que el crimen quede en la impunidad.
La crisis humanitaria de la familia
La tragedia médica ha arrastrado a la familia Zambrano a una difícil situación económica. Ambos padres han tenido que abandonar sus empleos y su ciudad de origen para acompañar a Sara Yuliana durante sus más de cuatro meses de hospitalización.
La familia ha agotado sus ahorros y ahora requiere ayuda económica para cubrir las necesidades básicas de la menor en el pabellón de quemados. Urgen donaciones para elementos esenciales como cremas para las heridas, pañales y otros implementos médicos vitales para su recuperación.