El 4 de febrero de 2025, el presidente Donald Trump anunció la implementación de aranceles adicionales del 25% a los productos de Canadá, una medida que ha generado controversia y reacciones internacionales. Esta acción forma parte de una serie de medidas que Trump ha prometido tomar como respuesta a la creciente crisis de salud pública derivada del tráfico de fentanilo y otros opioides sintéticos.
El documento emitido por la Casa Blanca especifica que los productos canadienses estarán sujetos a un arancel del 25%, aplicándose a mercancías introducidas para consumo en los Estados Unidos, a partir del 4 de febrero de 2025. Sin embargo, el importador deberá certificar que aquellos productos cargados en un buque antes de esa fecha no estarán sujetos al nuevo impuesto.
Además, los productos energéticos provenientes de Canadá tendrán un arancel del 10%, según se detalló en la notificación oficial. Esta medida no solo afecta a las importaciones, sino también establece que cualquier intento de represalia por parte de Canadá podría llevar a Trump a aumentar los aranceles.
Las razones detrás de los aranceles
Trump justificó la imposición de estos aranceles argumentando que las redes de crimen organizado están operando a lo largo de la frontera norte, facilitando el tráfico ilegal de personas y drogas. El gobierno estadounidense ha identificado a Canadá como un punto clave en el flujo de fentanilo hacia su territorio, especialmente en combinación con carteles mexicanos.
El fentanilo es una de las drogas más peligrosas y letales, siendo responsable de miles de muertes al año en los Estados Unidos. Según las autoridades, la cantidad de esta sustancia que cruza la frontera canadiense podría matar a 9,5 millones de estadounidenses.
Canadá no ha permanecido en silencio ante esta medida. El primer ministro Justin Trudeau anunció que responderán con aranceles del 25% a productos estadounidenses por un valor aproximado de 107.000 millones de dólares. Reflejando la tensión creciente entre ambos países, mientras que México también ha expresado su intención de imponer aranceles en respuesta.
Estas medidas pueden tener un impacto significativo en las relaciones comerciales entre los países involucrados. Mientras Estados Unidos busca frenar el flujo de fentanilo y otras drogas, las represalias podrían afectar gravemente la economía de Canadá y generar un ciclo de aranceles que afecte a ambas naciones.