El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este lunes 3 de marzo, que los aranceles del 25% a las importaciones provenientes de México y Canadá comenzarán a aplicarse este martes. Esta medida afecta a dos de los principales socios comerciales de EE.UU., generando una gran incertidumbre en los mercados internacionales y en la relación bilateral con ambos países.
Durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca, Trump insistió en que no hay más espacio para la negociación y que los aranceles entrarán en vigor como estaba previsto. “Mañana habrá aranceles: 25% para Canadá y 25% para México”, afirmó el mandatario. Además, sugirió que las empresas automotrices y otros sectores podrían evitar las tarifas si decidían trasladar su producción a EE.UU. “Lo que tienen que hacer es construir sus plantas en Estados Unidos, en cuyo caso no tendrán aranceles”, destacó Trump.
La confirmación de los aranceles tuvo un impacto inmediato en los mercados financieros. El Dow Jones, el principal índice bursátil de EE.UU., sufrió una caída de 650 puntos, lo que reflejó el nerviosismo de los inversores ante el riesgo de una guerra comercial a gran escala. A su vez, el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, sugirió que las empresas globales pueden evitar los aranceles mediante inversiones en la producción dentro del país.
La dependencia comercial de EE.UU. con México y Canadá
México se posicionó como el mayor socio comercial de EE.UU. en 2024, seguido de cerca por Canadá y China. Además, en conjunto, ambos países representan el 28,2% de todas las importaciones de Estados Unidos, lo que demuestra la relevancia de las relaciones comerciales con sus vecinos. Las medidas anunciadas por Trump podrían afectar considerablemente tanto a las empresas estadounidenses como a los consumidores, quienes verían incrementados los precios de diversos productos.
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Tras el anuncio, los líderes de México y Canadá expresaron su descontento. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, aseguró que su país respondería con aranceles del 25% sobre bienes estadounidenses por un valor de 155.000 millones de dólares. Según Trudeau, “no hay justificación” para los aranceles, ya que Canadá ha cumplido con los acuerdos previos con EE.UU.
