Cada 31 de agosto se celebra el Día Internacional de los Afrodescendientes, establecido por la ONU en 2021 con el fin de eliminar la discriminación hacia los afrodescendientes y destacar las contribuciones de la diáspora africana a nivel mundial.
Desde una perspectiva internacional, es esencial comprender cómo se aborda este tema en distintas regiones. Por ejemplo, Brenda Luz Castrillón Legarda, afroperuana y coordinadora de Políticas para la Población Afroperuana en el Ministerio de Cultura, resalta la relevancia de este día. Para ella, los afrodescendientes han dejado una marca importante en el marco de la diáspora. Ahora se reconoce la identidad de individuos afroperuanos, afrocolombianos y de otros países, quienes valoran sus raíces y luchan por la libertad y el reconocimiento de sus derechos, contribuyendo así a la identidad nacional.
Este día busca combatir estigmas y prejuicios basados en ideas infundadas de superioridad racial. Carlos Álvarez Nazareno, activista afro-argentino por los derechos humanos, destaca la necesidad de enfrentar el racismo desde temprana edad hasta la adultez. Afirma que erradicar el racismo estructural y fortalecer las comunidades es esencial para transformar la sociedad y fomentar el orgullo afrodescendiente.
Otro propósito de esta conmemoración es promover la inclusión mediante políticas sociales y derechos humanos, permitiendo que los afrodescendientes participen en diversos ámbitos.
En Colombia, Dayana Bermúdez, actriz afrodescendiente, resalta que, además de su identidad étnica y cultural, los afrodescendientes son seres humanos que pueden pertenecer a cualquier ámbito de la sociedad.
Jefferson Torres Guerrero, CEO de Corpocurrulao y Casa Editorial Étnica Imago, destaca que han surgido movimientos inspirados en la identidad y la ancestralidad, especialmente en Cali, una ciudad con una gran población afrodescendiente en América Latina.
En Cali, 637.023 personas se identifican como afrodescendientes, correspondiendo al 28.6% de la población caleña según el Censo DANE-2018.