Lo que debía ser una oportunidad para la solidaridad y el auxilio, terminó en un acto de barbarie que ha encendido las alarmas sobre el trato a los animales en Colombia. El accidente tuvo lugar en la vía que conecta a Candelaria con Palmira, en el Valle del Cauca. Tras el siniestro, varios transeúntes y conductores se acercaron al lugar, no para socorrer, sino para apropiarse del ganado que era transportado por el camión volcado.
Uno de los momentos más escalofriantes fue registrado en video; un vehículo 4×4 de color negro y placas HPW 843 fue captado mientras arrastraba a una vaca viva con una cuerda atada a su parte trasera. Las imágenes, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, muestran al animal deslizándose por el asfalto sin ningún tipo de compasión por parte del conductor.
El hecho fue catalogado como “inhumano” por muchos ciudadanos
Las reacciones no se hicieron esperar. Miles de usuarios en redes sociales expresaron su indignación, exigiendo justicia y la aplicación de la Ley 1774 de 2016, conocida como la Ley de Protección Animal en Colombia. Comentarios como “¡Inhumano!”, “Miseria humana” y “Rechazo absoluto a este acto atroz” inundaron las plataformas digitales, en un llamado a las autoridades a investigar y sancionar a los responsables.
Inicialmente se informó que el hecho ocurrió en Palmira, sin embargo, la Policía del Valle aclaró más tarde que el accidente se presentó en jurisdicción del municipio de Candelaria y fue atendido por personal de tránsito de esa localidad. La investigación del caso ya está en curso, y la comunidad exige que se tomen medidas ejemplares contra los responsables del maltrato.
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Adicionalmente del reclamo por justicia, el episodio ha abierto un debate más amplio sobre la necesidad de reforzar la educación en empatía y el respeto hacia los seres sintientes. Organizaciones animalistas, líderes comunitarios y ciudadanos han convocado a plantones y acciones legales para que este caso no quede impune.
Lo ocurrido no solo revela una preocupante falta de humanidad, sino que también pone sobre la mesa la urgencia de fortalecer las políticas públicas para la protección animal en emergencias y desastres. Mientras tanto, el país entero sigue exigiendo una respuesta contundente: no más impunidad para el maltrato animal.
