Las autoridades del norte del Valle del Cauca decidieron tomar medidas drásticas en medio del aumento de amenazas a la seguridad y la convivencia ciudadana. A través de decretos municipales, se establecieron restricciones como toques de queda y la prohibición del parrillero hombre en motocicletas. Estas acciones buscan frenar posibles actos violentos y prevenir el reclutamiento forzado de menores por parte de grupos al margen de la ley.
La alerta se centra en tres municipios clave: Zarzal, Roldanillo y La Unión. Allí, las administraciones locales, en coordinación con la Policía y otras instituciones, activaron controles especiales que regirán durante las noches. El objetivo es contener la creciente presencia de actores armados ilegales y reducir los delitos que suelen aumentar en las horas nocturnas.
El toque de queda se aplicará desde las 9:00 de la noche hasta las 5:00 de la mañana del día siguiente, mientras que el parrillero hombre queda restringido desde las 7:00 p.m. En el caso de Roldanillo, además, se incluyó la prohibición del consumo de licor en espacios públicos, como medida complementaria para disminuir riesgos en eventos masivos o zonas vulnerables.
Medidas buscan proteger a los niños y evitar reclutamientos
Las decisiones no solo responden a una situación de orden público. También se enfocan en evitar que los niños, niñas y adolescentes sean usados por organizaciones delictivas. “Estos decretos tienen como finalidad preservar la convivencia, el respeto y la protección de la vida de nuestros menores”, explicó el mayor Hans Cardona, comandante del distrito de Policía en Roldanillo.
Desde esa institución se alertó sobre la presencia de grupos armados ilegales que estarían intentando ganar control territorial en algunos corregimientos y veredas. En varios puntos del norte del departamento se han identificado patrones de reclutamiento, especialmente de menores que no están escolarizados o que viven en condiciones de alta vulnerabilidad.
Las autoridades locales piden a la ciudadanía acatar las restricciones y colaborar denunciando cualquier movimiento sospechoso. También se invita a los padres a no dejar a sus hijos solos en horas de la noche y evitar que circulen sin supervisión.
Además, se fortalecerá la presencia institucional en los sectores de mayor riesgo. Patrullajes mixtos, operativos sorpresa y monitoreo con cámaras hacen parte de la estrategia.
Apoyo de la comunidad será clave para mantener el control
La implementación de estas medidas requiere el compromiso de toda la comunidad. Alcaldes, líderes sociales y representantes de organizaciones civiles respaldaron las decisiones adoptadas. Se espera que los toques de queda no solo sirvan como medida preventiva, sino que también generen espacios de reflexión y cuidado colectivo.
Los operativos también tendrán un enfoque diferencial, especialmente para proteger a mujeres y jóvenes que suelen ser blanco de extorsión o violencia en estas zonas.
Aunque por ahora no se ha informado de una duración específica para estas restricciones, las autoridades aclararon que se evaluará su efectividad semana a semana. En caso de mejora en las condiciones de seguridad, se podrían flexibilizar. Pero, si las amenazas persisten, se extenderían o incluso se reforzarían.
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La prioridad, dicen desde la Policía, es garantizar que los habitantes de Zarzal, Roldanillo y La Unión puedan vivir sin miedo y con garantías mínimas de seguridad.
