El barrio Mariano Ramos, en el suroriente de Cali, despertó con temor este lunes luego de un atentado con explosivos que dejó dos policías muertos. Las primeras investigaciones apuntan al Ejército de Liberación Nacional (ELN) como posible responsable, según la Policía Metropolitana de Cali. Los residentes vivieron instantes de confusión y miedo durante la madrugada.
Patricia Cardona Díaz, habitante de la zona, describió los momentos posteriores a la detonación: “Mucha angustia y desespero porque no sabíamos realmente qué era. Hasta que nos asomamos y vimos ese cuadro tan lúgubre”, relató. La explosión ocurrió cerca de las 4 de la mañana, justo cuando los policías realizaban su patrullaje rutinario.
Patricia narró que los primeros uniformados en llegar tardaron aproximadamente 15 minutos. “Apenas llegaron los muchachos a socorrerlos, detonó la segunda carga. Tuvimos que refugiarnos, el estallido fue horrible”, indicó.
La mujer destacó que los vidrios de varias casas volaron por la fuerza de la explosión y que los daños se concentraron principalmente en el primer piso de los inmuebles.
Además de los daños materiales, la situación dejó un fuerte impacto psicológico en la comunidad. Patricia comentó: “Lo peor fue ver a los dos muchachos muertos sin poder hacer nada. La impotencia y el miedo son inevitables”. La detonación generó caos en el barrio y alteró la tranquilidad que habitualmente se vive en la zona.
Medidas de seguridad en la zona
Tras el atentado, el secretario de Seguridad de Cali expresó solidaridad con las familias de los policías fallecidos y con la institución. Señaló que la ciudad reforzará las acciones de patrullaje y vigilancia en el barrio Mariano Ramos, con el fin de proteger a los residentes y prevenir nuevos incidentes. Además, recordó que se ofrece una recompensa de hasta 200 millones de pesos por información que permita identificar a los responsables materiales e intelectuales del ataque.
El atentado ocurrió mientras los policías protegían a los ciudadanos en sus actividades habituales. Las investigaciones continúan, con la prioridad de identificar a los responsables y esclarecer la participación del ELN, según indicaron fuentes oficiales.
Los residentes del barrio Mariano Ramos permanecen atentos y han reforzado medidas de precaución. Patricia Cardona concluyó: “Todo es de Dios, nos salvó la vida en esta ocasión”.
