Recientemente, el Ministerio de Salud y Protección Social (Minsalud) de Colombia emitió una alerta sanitaria tras detectar un aumento significativo de casos de fiebre amarilla en diversas zonas del país. Especialmente, el departamento del Tolima ha registrado un notable incremento de casos en los últimos días, convirtiéndose en uno de los más afectados. Ante esta situación, el Ministerio de Salud emitió la Circular 018 en octubre de 2024, que establece medidas urgentes para prevenir y contener la propagación de esta enfermedad, transmitida por el mosquito Aedes aegypti.
El objetivo principal de la nueva circular es reforzar la respuesta sanitaria en las zonas de riesgo mediante un plan de contingencia integral que abarca la intensificación de la vigilancia en salud pública, la aplicación masiva de vacunas, y la promoción de prácticas preventivas para evitar nuevos casos. Las autoridades de salud destacan que la fiebre amarilla es una enfermedad prevenible a través de la vacunación, recomendando a las personas en áreas vulnerables que se vacunen lo más pronto posible. Además, se ha pedido a la población el uso constante de métodos de barrera, como mangas largas, repelentes y mosquiteros, para protegerse de las picaduras de mosquitos.
Zonas de alto riesgo de Fiebre Amarilla en Colombia
El Ministerio ha señalado varias regiones del país como de alto riesgo debido a la presencia activa de la enfermedad. Entre los departamentos con casos confirmados en 2024 se encuentran Putumayo, Caquetá, Huila, Nariño, y Tolima. También se han determinado zonas vecinas a estos municipios como áreas de alto riesgo, lo que aumenta la necesidad de medidas preventivas en estos territorios. En total, el Ministerio de Salud ha considerado de alto riesgo a los departamentos de Amazonas, Arauca, Caquetá, Casanare, Cesar, Chocó, Guaviare, Meta, Putumayo, Vaupés y Vichada, además de ciertos municipios en Antioquia, Bolívar, Boyacá y otros departamentos.
En particular, municipios como Dabeiba y Mutatá en Antioquia, y Santa Marta en Magdalena, han sido identificados como áreas de especial atención, donde las autoridades están intensificando las medidas preventivas. Es importante mencionar que el Ministerio de Salud subraya que la fiebre amarilla sigue siendo una amenaza activa, y se debe mantener la vigilancia en todas las zonas de riesgo, especialmente en las zonas fronterizas e islas, como San Andrés y Providencia.
La vacunación como estrategia principal de prevención
El ministro de Salud, Dr. Guillermo Alfonso Jaramillo, recordó que la fiebre amarilla es una enfermedad prevenible con una sola dosis de vacuna, que es válida de por vida. Esta vacuna está disponible de forma gratuita para todas las personas entre 1 y 18 años en todo el país, y también para aquellos entre 1 y 59 años que vivan en municipios de alto riesgo. A pesar de que no existe un tratamiento específico para la fiebre amarilla una vez contraída, la vacuna es altamente eficaz para prevenir su propagación y salvar vidas.
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Fianalmente, la fiebre amarilla representa un riesgo latente, pero con las medidas adecuadas de vacunación y prevención, se puede evitar que esta enfermedad cause más daño. Las autoridades de salud recalcan la importancia de la acción comunitaria y la responsabilidad individual para frenar el avance de la fiebre amarilla en las zonas más afectadas
