Ante la grave situación que enfrenta Colombia por la actual temporada de lluvias, el presidente Gustavo Petro decretó el estado de desastre nacional. Esta medida permitirá movilizar recursos de manera más ágil para atender las emergencias en varias regiones, con especial énfasis en La Guajira, Chocó y Bogotá, donde las afectaciones son especialmente graves. En el caso de Bogotá, el racionamiento de agua ha llegado a períodos de 24 horas cada nueve días, mientras que en La Guajira y Chocó las intensas lluvias han provocado múltiples daños.
El presidente Petro dirigió un Puesto de Mando Unificado (PMU) en la sede de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Desde ahí, tomó la decisión de declarar la emergencia nacional, permitiendo la reasignación de fondos hacia la gestión de las afectaciones derivadas de las intensas lluvias. Acompañado por el ministro de Defensa, Iván Velásquez, y el director de la UNGRD, Carlos Carrillo, Petro explicó que esta decisión responde a la creciente vulnerabilidad de diversas regiones, exacerbada por fenómenos como la deforestación, economías ilegales y una urbanización sin control, especialmente en la sabana de Bogotá.
“El país ha pasado ya por dos años de situaciones climáticas y diferentes. Por esa razón, por lo que acontece en estos días, se declara situación de desastre en todo el país en virtud de la variabilidad climática generadora de impactos impredecibles e inusuales, aumentando la vulnerabilidad en los territorios. Esta vulnerabilidad viene agravándose por impactos que tienen que ver con la desforestación, las economías ilícitas y en el caso de Bogotá, en mi opinión, por una urbanización desaforada de la sabana”, dijo el mandatario.
Impacto y alcance de la declaratoria de emergencia
La declaratoria de emergencia habilita al Gobierno a redirigir el presupuesto nacional desde otras áreas hacia las zonas más afectadas por el cambio climático y los eventos extremos recientes. “Esta medida permite canalizar fondos de entidades que no tienen relación directa con la atención de emergencias hacia los territorios en crisis climática,” señaló el mandatario.
Además, Petro advirtió que se espera que la temporada de lluvias se extienda hasta diciembre, con la posibilidad de que nuevos puntos críticos surjan, como en Santander, donde también se anticipa una situación de alto riesgo. En los próximos días, se dará a conocer un plan detallado de inversión pública para atender las necesidades de las áreas más afectadas, priorizando las zonas con mayores problemas de abastecimiento y daños infraestructurales.
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El anuncio del presidente subraya la urgencia de actuar frente a la variabilidad climática, cuyos efectos se ven agravados por múltiples factores de vulnerabilidad en Colombia.
