Un acuerdo sin precedentes está por concretarse entre el expresidente Álvaro Uribe Vélez y el Gobierno de Gustavo Petro. Pues el Estado comprará 200 hectáreas de la hacienda El Ubérrimo, un terreno icónico en Córdoba, para entregarlas a familias campesinas. Este proceso forma parte de la reforma rural integral impulsada por la administración actual y busca garantizar el acceso a la tierra a comunidades que históricamente han carecido de ella.
Uribe y el director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), Felipe Harman, han gestionado directamente la transacción. Según lo pactado, destinarán las tierras a proyectos productivos para 30 familias campesinas. Este acuerdo se enmarca dentro de los compromisos adquiridos en el Acuerdo de Paz de 2016 y refuerza la política de redistribución de tierras que el gobierno Petro ha venido promoviendo.
El terreno en cuestión forma parte de una extensa finca de más de 700 hectáreas que pertenece a la familia Uribe Vélez. La empresa Agropecuaria El Ubérrimo S.A.S., representada legalmente por Tomás Uribe, hijo del exmandatario, se encargó de la oferta inicial. Luego de un avalúo comercial realizado por la firma DCI Colombia S.A.S., se estableció un precio de 3.031 millones de pesos colombianos.
Detalles del pago y postura de Uribe
El pago se dividirá en dos partes: cancelarán el 50 % al firmar la escritura pública y desembolsarán el resto cuando expidan una copia autenticada del documento.
Álvaro Uribe, fuerte crítico de las políticas de Petro, sorprendió al aceptar vender una porción de su hacienda. Sin embargo, ha manifestado preocupaciones sobre el avalúo y el impacto en el resto de sus tierras. A través de un video publicado en octubre de 2024, el exmandatario expresó su inquietud por el valor fijado y advirtió que este tipo de precios pueden afectar a los productores pecuarios de la región. “La hemos ofrecido al Gobierno, pero hemos dicho que a un precio mucho menor al avalúo y hemos pedido que se reconsideren los avalúos prediales en la zona”, afirmó.
Cabe resaltar que, el proceso de adquisición de tierras hace parte del plan que el presidente Petro estableció con la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) para comprar tres millones de hectáreas y distribuirlas entre campesinos sin tierra. Sin embargo, la iniciativa ha avanzado con dificultades. Según datos de la Contraloría General, hasta noviembre de 2024 solo se habían adquirido 800 hectáreas, una cifra bastante alejada de la meta.
El Ubérrimo, entre la política y la polémica
Más allá de ser una finca productiva, El Ubérrimo ha sido un símbolo del poder de Uribe. Durante sus gobiernos, allí se tomaron decisiones clave sobre seguridad y se celebraron reuniones con figuras nacionales e internacionales. Pero también ha sido centro de controversias. Políticos como Gustavo Petro e Iván Cepeda han cuestionado constantemente su historia y las condiciones en las que se consolidó como una de las haciendas más importantes de la región.
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Ahora, con este acuerdo, una parte de esas tierras pasará a manos de campesinos. Mientras unos lo ven como un avance en la reforma agraria, otros consideran que aún queda mucho camino por recorrer en la redistribución de la tierra en Colombia.