Tras más de diez días de bloqueos en distintas regiones del país, el Gobierno nacional y el Comité Nacional del Paro Arrocero llegaron a un acuerdo que permitió levantar la movilización y avanzar hacia soluciones estructurales para el sector. El pacto, que consta de siete puntos, fue alcanzado luego de un proceso de diálogo abierto y técnico, en el que participaron varias carteras ministeriales, organismos de control y voceros de los arroceros.
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El eje central del acuerdo es la regulación del precio del arroz paddy verde, mediante un régimen de libertad regulada. Según lo anunciado, se establecerá un precio mínimo de compra que cubra los costos de producción de los agricultores sin generar utilidades, protegiendo así a quienes han sufrido la caída del valor del grano en las últimas semanas.
Creación de una comisión técnica para definir apoyos a productores
Además del componente económico, el pacto contempla la creación de una comisión técnica para definir apoyos a los productores más afectados, así como medidas de defensa comercial frente a las importaciones que puedan impactar el mercado interno. A esto se suman compromisos en materia ambiental, como la revisión del sistema de la Tarifa de Uso del Agua (TUA), y en temas tributarios, como el análisis de las fuentes de información usadas por la UGPP.
En cuanto a la fiscalización, se reforzarán los controles en centros de acopio y molinos para garantizar transparencia en los inventarios y evitar prácticas desleales. Finalmente, con la firma del acta, el Comité Nacional del Paro Arrocero se comprometió a suspender los bloqueos y las manifestaciones, aunque dejó constancia de que seguirá vigilante del cumplimiento de lo acordado.
Este acuerdo es considerado por el Gobierno como un hito en la gestión de conflictos agrarios, al consolidarse como un ejemplo de resolución pacífica mediante el diálogo y la construcción conjunta de soluciones.
