En medio de la polémica que causó el representante Miguel Polo Polo al destruir el homenaje de las madres de Soacha y cuestionar la legitimidad de la cifra de 6.420 asesinatos extrajudiciales, mal llamados “Falsos positivos” que ocurrieron entre 2002 y 2008.
El presidente de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el magistrado Alejandro Ramelli, anunció que los 6.420 tienen “nombre y cédula” y enfatizó en que son hechos “que no se pueden volver a repetir.”
“La JEP dará a conocer los nombres de las víctimas identificadas en seis autos de determinación de hechos y conductas en los cuales han sido imputados los máximos responsables”, manifestó el magistrado Ramelli. Además, reiteró que la cifra es resultado de un universo provisional de víctimas a partir del análisis de varias bases de datos.
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El comunicado de la JEP afirma que “Por estos crímenes de guerra y de lesa humanidad, 85 comparecientes de la fuerza pública, entre ellos dos generales (r) de la República, han reconocido responsabilidad en audiencia pública ante las víctimas.”
