Este martes 18 de marzo, Cali será uno de los puntos clave en la jornada de marchas convocada por el presidente Gustavo Petro, en apoyo a sus reformas sociales y a la consulta popular. Aunque la ciudad no se acogerá al día cívico propuesto por el mandatario, diversos grupos de ciudadanos se alistan para unirse a la movilización.
Según el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, los caleños que participen en las marchas deberán concentrarse en dos puntos principales que son el Parque de las Banderas y la Glorieta de la Estación. Las movilizaciones comenzarán a las 9:00 a. m. de este martes. Las autoridades seleccionaron estos lugares como puntos neurálgicos de la manifestación, donde los ciudadanos expresarán su apoyo a las reformas que impulsa el gobierno de Petro en diversas áreas sociales.
A pesar de la convocatoria presidencial, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, ha dejado claro que la ciudad no adoptará el día cívico planteado por el presidente Petro. En un mensaje compartido a través de su cuenta oficial en redes sociales, Eder reiteró que tanto los servicios públicos como las instituciones educativas y los hospitales de la ciudad operarán con normalidad. “Respetamos el derecho a la protesta pacífica, pero nuestra prioridad es que Cali avance con trabajo y resultados para los caleños”, afirmó el mandatario local.
Reacciones de otros alcaldes
En línea con la postura de Cali, el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, también se mostró contrario a la implementación del día cívico en su ciudad. A través de sus redes sociales, Gutiérrez resalto que la ciudad continuará con sus actividades habituales, destacando que los servicios públicos y las instituciones educativas no se detendrán. “Tenemos una gran responsabilidad con Medellín, y no vamos a parar”, señaló.
De manera similar, el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, anunció que su ciudad tampoco se acogerá al decreto presidencial. “Bucaramanga es una ciudad productiva, con deberes en el servicio ciudadano que no pueden parar”, explicó Beltrán, asegurando que se garantizará el derecho a la protesta, pero que la administración local funcionará con normalidad.
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A pesar de las protestas programadas, la administración municipal de Cali se ha comprometido a mantener la normalidad en la operación de servicios esenciales. Para los habitantes de la ciudad, esto significa que podrán acceder a hospitales, colegios y otros servicios públicos sin interrupciones, lo que refleja una postura marcada frente a la jornada de movilización.
