El gobierno de Gustavo Petro está revisando un cambio significativo en la forma en que se abordan los programas de apoyo a las comunidades más vulnerables. Mientras que en su campaña electoral de 2022 se comprometió a ofrecer subsidios para mejorar las condiciones de vida de los colombianos más necesitados, ahora el Director del Departamento de Prosperidad Social (DPS), Gustavo Bolívar, ha mostrado una postura diferente.
Durante una reunión reciente, Bolívar expresó que las transferencias monetarias, aunque necesarias en el corto plazo, no son la solución para erradicar la pobreza. En lugar de depender de estos subsidios, considera que se deben priorizar proyectos productivos, como el acceso a crédito blando a través del Banco Agrario, para fomentar el emprendimiento y la generación de empleo.
“Nosotros más bien desde el DPS, en vez de pagar subsidios que se quedan ahí, en la miserableza de que la persona, el ser humano, pueda cumplir con los mínimos básicos, digamos para comer y eso, y de ahí, entrar en un ciclo perpetuo de pobreza extrema. Entonces, más bien, lo que vamos a hacer nosotros es subsidiar las tasas de interés para que la gente pueda tener préstamos, y hacer préstamos sin tantos requisitos dentro del Banco Agrario”, afirmó el director del DPS en los videos a los que tuvo acceso SEMANA.
Esta postura se refleja en su crítica al sistema de Sisbén, donde algunas personas prefieren mantenerse en el rango más bajo de pobreza para seguir recibiendo las ayudas, evitando progresar por miedo a perderlas. Bolívar considera que la clave está en promover el acceso a créditos con tasas de interés subsidiadas para que los colombianos puedan emprender, generar ingresos y salir de la pobreza de manera sostenible.
¿Qué cambiará en los próximos años?
En la práctica, esto implicaría una transición hacia una estrategia enfocada en el emprendimiento. Según Bolívar, el gobierno está trabajando para crear un sistema más accesible de préstamos, con condiciones más flexibles que las ofrecidas por los bancos privados. En 2024, se espera entregar alrededor de 6.000 incentivos para fomentar la creación de empresas dentro de lo que se ha denominado “economía popular”. Además, el DPS busca habilitar una base de datos que registre las iniciativas de emprendimiento de los ciudadanos, para que puedan acceder a créditos y recursos del Estado.
Sin embargo, el cambio no será fácil. Como mencionó Bolívar, algunos de los ciudadanos beneficiados por los subsidios actuales pueden resistirse a abandonar el modelo de ayudas directas, lo que podría generar una reacción negativa. A pesar de las dificultades, el director del DPS está convencido de que este nuevo enfoque es el único que puede romper con los ciclos de pobreza que afectan a millones de colombianos.
Respaldo presidencial y el futuro de los subsidios
No obstante, cabe mencionar que, el presidente Petro, desde mayo de este año, ha instado a su equipo a transformar los subsidios en iniciativas de emprendimiento. En varias ocasiones, ha enfatizado la necesidad de que los beneficiarios de programas sociales se organicen y encuentren maneras de ser productivos de manera independiente. “No es suficiente con ayudar a las personas a sobrevivir, hay que darles las herramientas para prosperar”, afirmó Petro.
A largo plazo, el gobierno está dispuesto a reducir los subsidios directos y fomentar el uso de recursos como el capital semilla para emprendedores. Esta transición forma parte de una visión más amplia del gobierno de Petro para transformar el país, enfocándose no solo en la asistencia social, sino en el impulso de una economía inclusiva y productiva.
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Con todo esto, el futuro de los subsidios en Colombia está en un proceso de transformación. El gobierno busca no solo paliar la pobreza, sino erradicarla mediante el fomento de la autonomía económica de los ciudadanos más vulnerables, pero esta estrategia aún enfrenta varios desafíos en su implementación.
