Un grupo de congresistas colombianos viajó a Washington con el propósito de exponer ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) lo que consideran una persecución del Gobierno de Gustavo Petro contra el poder Legislativo. Durante su estadía en la capital estadounidense, los legisladores han sostenido reuniones con distintos actores políticos y organizaciones con el objetivo de fortalecer las relaciones bilaterales y llamar la atención de la comunidad internacional sobre la situación en Colombia.
Encuentros estratégicos en Washington
El lunes, la delegación sostuvo un encuentro con el senador colombo-estadounidense Bernardo Moreno, un conocido crítico del gobierno Petro. La reunión tuvo lugar en un edificio de oficinas del Senado de EE.UU. y sirvió como escenario para discutir la situación política colombiana y las recientes tensiones diplomáticas con Washington.
Ese mismo día, los congresistas se reunieron con John Gantt, presidente de la International Conservation Caucus Foundation (ICCF), una organización enfocada en la conservación ambiental. Aunque la cita tenía un enfoque ambiental, los legisladores aprovecharon el espacio para exponer sus preocupaciones sobre el impacto de las políticas gubernamentales en la estabilidad institucional de Colombia.
Para este martes, la agenda de los parlamentarios incluye un encuentro con el congresista Mario Díaz-Balart, representante republicano del estado de La Florida. Díaz-Balart ha manifestado en varias ocasiones su desacuerdo con el rumbo que ha tomado Colombia bajo la administración de Petro. En la reunión, los legisladores colombianos buscan fortalecer los lazos con sectores políticos influyentes en Estados Unidos y analizar posibles estrategias para abordar la crisis institucional que, según ellos, atraviesa el país.
Visita a la ONU y la CIDH
Como parte de su itinerario, este miércoles la delegación visitará la sede de la ONU y la CIDH en el marco de las actividades del Parlamento Latinoamericano. Allí, los congresistas esperan presentar sus denuncias sobre el deterioro de la independencia de poderes en Colombia y la necesidad de una vigilancia internacional más rigurosa sobre la situación del país.
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Los legisladores confían en que su visita a Washington generará eco en la comunidad internacional y ayude a visibilizar lo que consideran una amenaza para la democracia colombiana. Su intención es que los organismos multilaterales y sectores políticos de EE.UU. presten mayor atención a lo que ocurre en Colombia y actúen en consecuencia.
