La escasez de medicamentos en Colombia ha generado alarma entre pacientes, médicos, legisladores y hospitales que han reportado dificultades constantes para acceder a fármacos fundamentales. Las largas filas en farmacias, el desabastecimiento de medicinas clave y la incertidumbre sobre el suministro han puesto en jaque el sistema de salud. Este panorama ha llevado al Congreso a tomar cartas en el asunto y convocar una mesa de trabajo urgente en búsqueda de soluciones para esta crisis de medicamentos.
En respuesta a esta crisis, la Cámara de Representantes ha organizado una reunión técnica para el jueves 27 de marzo en el Ministerio de Salud. En este encuentro se discutirán las principales causas del problema y se buscarán soluciones concretas para garantizar el acceso a los medicamentos. La convocatoria ha sido impulsada por el representante Alejandro Ocampo, quien advierte que la regulación de precios, distribución y abastecimiento deben ser revisados a fondo.
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Una mesa de trabajo para soluciones urgentes a crisis de medicamentos
El encuentro reunirá a actores clave del sector salud, incluyendo representantes de la Nueva EPS, Copservir, la Superintendencia de Servicios, el Fomag y Drogas La Rebaja. También participarán laboratorios administrados por la Sociedad de Activos Especiales (SAE), con el objetivo de evaluar estrategias que permitan mejorar la distribución y suministro de los medicamentos en el país. El congresista Ocampo ha destacado que una de las principales metas es establecer un acuerdo comercial que permita ampliar los puntos de dispensación de medicamentos.
“Buscamos que los usuarios no tengan que pasar noches enteras esperando por sus tratamientos. Con más de 200 municipios involucrados en este plan, podremos garantizar una entrega más eficiente y oportuna de los medicamentos”, explicó.
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Denuncias por presunto acaparamiento
Durante el debate, se pondrá sobre la mesa una grave denuncia: algunas entidades estarían reteniendo medicamentos en lugar de entregarlos a los pacientes. Esta sospecha ha encendido las alarmas, ya que el desabastecimiento podría no deberse únicamente a factores externos, sino a decisiones internas dentro del sector farmacéutico.
“No vamos a permitir que aquellas personas que los colombianos les pagamos para que entreguen los medicamentos, los guarden y pongan en riesgo la vida de los colombianos”, advirtió Ocampo.
El Gobierno y los legisladores esperan que esta mesa de trabajo permita encontrar soluciones viables y de rápida implementación. Una de las alternativas es fortalecer los acuerdos entre las EPS y las redes de farmacias, así como garantizar un monitoreo más estricto del abastecimiento en todo el país. Se espera que, al término del encuentro, se establezcan compromisos claros que pongan fin a la incertidumbre de miles de pacientes que dependen de estos medicamentos para su bienestar y supervivencia.
