En medio de un clima de polarización creciente y con reformas clave aún en disputa, el presidente Gustavo Petro volvió a protagonizar el debate sobre una eventual reelección. A través de sus redes sociales, el jefe de Estado comentó los resultados de una reciente encuesta que lo posiciona como la figura política más influyente si las elecciones presidenciales de 2026 se definieran por recomendación de líderes históricos del país.
El mandatario no se limitó a compartir la imagen de la medición realizada por Guarumo y EcoAnalítica que lo ubica por encima de expresidentes como Álvaro Uribe, Iván Duque y Juan Manuel Santos sino que acompañó el gráfico con un mensaje de alto contenido político: “Le podemos ganar a la oligarquía y las mafias, otra vez. Depende del pueblo”. Esta declaración reactivó una discusión que parecía zanjada desde que en 2015 se eliminó la posibilidad de reelección presidencial en Colombia.
La encuesta, con un margen de confianza del 95 %, consultó sobre la simpatía de los ciudadanos hacia posibles candidatos promovidos por figuras como Petro o los expresidentes. Con un 25,5 % de respaldo, Petro superaría a Uribe (21,9 %) y a Duque (7 %), según el sondeo. Aunque no se trata de una intención directa de voto, el presidente interpreta los datos como una señal de apoyo ciudadano a su proyecto político.
¿Posible reelección de Petro?
Durante una intervención reciente en Soledad, Atlántico, el mandatario también revivió comentarios sobre sugerencias internas respecto a una posible reelección, aunque aseguró no estar interesado en perpetuarse en el poder. “El día que vuelva a la Presidencia de la República será porque el pueblo ha hecho una revolución”, expresó, dejando claro que, más que una candidatura, defiende una continuidad ideológica impulsada desde las bases populares.
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Las declaraciones del presidente se producen en un momento sensible para su gobierno, con varias reformas estructurales en juego salud, pensiones, trabajo y en medio de críticas constantes sobre su estilo de liderazgo. Mientras tanto, juristas y sectores opositores recuerdan que la Constitución prohíbe la reelección presidencial inmediata y posterior, por lo que cualquier intento en esa dirección requeriría una reforma constitucional, lo cual abriría un nuevo frente político y jurídico.
A medida que se acerca la campaña presidencial de 2026, los discursos como el de Petro comienzan a perfilar un terreno fértil para las disputas ideológicas y el choque de narrativas. Aunque el presidente insiste en que no busca reelegirse, sus palabras despiertan inquietudes y expectativas sobre el futuro de su legado político y el rumbo que tomará el progresismo en Colombia tras su mandato.
